Día internacional de las familias
Conmemoramos el día internacional de las familias con el objetivo de destacar su importancia en sociedad, su diversidad y transformación a lo largo del tiempo. Además, aprovechamos este día para reivindicar una protección social suficiente y medidas reales para la conciliación de la vida familiar y laboral.
El concepto de familia se ha transformado en las últimas décadas evolucionando de acuerdo a las tendencias mundiales y los cambios demográficos. Las Naciones Unidas consideran que la familia constituye la unidad básica de la sociedad y, en este contexto, el Día Internacional de las Familias nos da la oportunidad de reconocer, identificar y analizar cuestiones sociales, económicas y demográficas que afectan a su desarrollo y evolución.
Este día sirve también para visibilizar la diversidad en su composición: monomarentales, monoparentales, extensas, de parejas del mismo sexo, sin descendencia, entre otras inclusive como aquellas que se construyen como redes de apoyo y afecto. De hecho, según la Declaración Universal de los Derechos Humanos la familia es un elemento natural y fundamental de la sociedad. Además, toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar.
Para el año 2024 Naciones Unidas ha propuesto el lema “Familias y Cambio Climático” con el objetivo de crear conciencia sobre cómo el cambio climático afecta a las familias y el papel que pueden desempeñar en la acción climática. A través de iniciativas familiares y comunitarias podemos fomentar la acción climática con educación, acceso a la información, capacitación y participación comunitaria. Las familias transmiten valores de generación en generación, por lo que es importante inculcar hábitos sostenibles y conciencia climática en las familias desde una edad temprana.
No menos importante, aprovechamos para reivindicar medidas de protección social suficiente para las familias y medidas reales para la conciliación de la vida familiar y laboral. Las labores de crianza siguen estando realizadas en su mayor parte por mujeres, por lo que necesitamos políticas con perspectiva feminista de calidad y efectivas. De hecho, 6 de cada 10 mujeres renuncian a su carrera profesional al ser madres. Además, no podemos olvidar de que muchas personas mayores hoy, sobre todo las abuelas, tienen que encargarse de labores de cuidado o cobertura de necesidades de sus nietos/as debido a que sus padres y madres se encuentran trabajando.
Por ello indicamos que:
- Se necesitan medidas de conciliación real para dedicar tiempo de calidad con modelos de crianza positiva.
- Se necesitan políticas y medidas efectivas y suficientes destinadas a jóvenes, personas con discapacidad y/o dependencia con sus particularidades.
- El empleo de calidad y la flexibilidad laboral son básicos.
- La perspectiva feminista debe entrar en las familias para disponer de modelos de relación basados en la equidad.
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